Aunque casi todos han oído hablar sobre las muelas del juicio, no todos conocen realmente para qué sirven cuándo comienzan a salir o en qué casos se deben extraer para no ocasionar problemas con en el resto de los dientes. Las muelas del juicio o también llamadas terceros molares, son los últimos dientes en aparecer y se ubican en los extremos de los maxilares.
Es habitual que una persona tenga los cuatro molares, pero no es excepcional que pueda haber solo tres, dos, uno o ninguno. Estas piezas dentales suelen aparecer entre los 16 y 18 años y terminan de salir a los 20 años. En ocasiones pueden hacerlo con más retraso o
incluso no llegar a salir y quedarse “atoradas” dentro de los huesos.
Cuando esto sucede se denominan muelas retenidas. Las razones por las que no llegar a salir son varias:
- Mala posición del diente
- Encía gruesa o difícil de traspasar por el molar
- Falta de espacio en la zona
- Densidad de hueso
La aparición de los terceros molares no siempre provoca síntomas, sin embargo te puedes dar cuenta del comienzo, si notas un intenso dolor en la zona de los molares, en mandíbula que pueda llegar hasta los oídos e incluso ojos, encías sensibles, hinchazón en la mandíbula, dificultad al abrir boca y mal aliento.
En ocasiones los molares no pueden llegar a salir correctamente y se provoca la retención. Existen dos tipos de retenciones, la parcial y la total.
- La retención parcial: Es aquella en la que aparece parte de la corona de la muela.
- La retención total: Significa que el molar no puede atravesar la encía.
Cuando las muelas no han terminado de salir pueden provocar muchos problemas en nuestra boca e incluso afectar al resto de órganos dentarios. Al estar situados al final, es mas difícil su limpieza, por lo que es probable la aparición de bacterias e infecciones que causen inflamación de tejidos, la aparición de caries y de dolor.
En algunos casos los terceros molares pueden desarrollarse torcidas, modificando la posición del resto de los órganos dentarios y provocar la aparición de caries. Si se realizan las extracciones de los terceros molares es importante el cuidado para evitar infecciones, en las primeras 24 horas es normal sentir molestia y es conveniente no enjuagarse realizando buches, ya que puede provocar sangrado y tarde en cicatrizar.
Se debe llevar una dieta blanda y tener cuidado con la limpieza dental, no se debe fumar ni beber líquidos muy calientes durante la recuperación. Así mismo realizar irrigaciones en las zonas para retirar todo restante de alimento, con esto se evita cualquier infección.
